Este martes se realizó la evaluación subjetiva de los reproductores que abrirán la zafra. 

Un toro de cabaña Los Charrúas –de Mario Ibarburu S en C– y otro de cabaña La Madrugada –de Gaudin SA– fueron los ganadores de los grupos uno y dos, respectivamente, de la 37ª prueba anual de comportamiento de toros Hereford. Los resultados objetivos de la prueba se publicaron este martes, en la jornada de evaluación subjetiva de los reproductores, en la Central de Pruebas de Kiyú, ubicada en esa zona del departamento de San José.

El toro que obtuvo la mayor ganancia diaria fue el de la caravana 34, de La Madrugada, con 1,510 kilos por día. Los reproductores fueron alimentados solamente con pasturas, sin ningún tipo de suplementación.

Juan Luis Gaudin, titular de La Madrugada, comentó a El Observador sobre su satisfacción por el resultado. Recordó que toros de la cabaña ganaron en varias oportunidades, incluso en años consecutivos (2004-2005 y 2012-2013).

Los toros se ordenaron por índice final, ponderando 75% la ganancia de peso diaria y 25% el peso a los 18 meses. La prueba es organizada por la Sociedad de Criadores de Hereford del Uruguay (SCHU), con el respaldo del Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA).

La prueba comenzó el 9 de octubre de 2012 y finalizó el 23 de abril de este año, tuvo una duración de 196 días y participaron 37 toros de 37 cabañas.

Mario Ibarburu comentó a El Observador que cuando un toro se elige para participar en la prueba de Kiyú aun es muy joven y su comportamiento es una incógnita. “Hay que tener un poco de suerte”, reconoció el cabañero, quien no ocultó su alegría por el logro.

Ayer, luego de presentados los datos objetivos, los toros fueron evaluados subjetivamente por los jurados Walter Romay, Rafael Burutarán y José María del Campo.  Los puntajes del jurado serán procesados y combinados con los datos objetivos y de diferencia esperada en la progenie (DEP), para la elaboración del orden de ventas. Los toros de Kiyú abren tradicionalmente la zafra de reproductores bovinos, a fines de setiembre.

El jurado José María del Campo comentó a El Observador que el nivel de los toros fue parejo. Explicó que para la evaluación observó sobre todo la estructura, abertura de patas, profundidad de costillas, lugar donde meter carne, pigmentación y circunferencia escrotal. “Son factores que se complementan. El temperamento del animal es también importante porque le facilita al productor el trabajo diario”, agregó.

Fonte: El Observador